En pleno auge de las redes sociales, las posibilidades para las empresas son múltiples, en cuanto a la comunicación y los negocios. Muchas firmas importantes han querido aprovechar esta oportunidad que brindan las nuevas tecnologías, creando redes sociales propias. Por ejemplo, La Caixa acaba de poner en marcha la primera red social para clientes de una entidad financiera en España.
Este nuevo servicio, bautizado como “Online Community CaixaEmpresa”, ha sido diseñado para que “empresas y autónomos vinculados a la caja puedan ampliar su red de contactos y tengan acceso a posibles nuevos socios, clientes o proveedores”, según La Caixa. Para poder ser miembro de esta red, los interesados tendrán que recibir una invitación de su oficina.
Este producto ha sido pensando especialmente para las pymes y los profesionales con un alto grado de vinculación con su gestor de negocio de La Caixa. Uno de los principales servicios de esta red social es que los usuarios dispondrán de distintos recursos para reforzar su visibilidad en la red. Esta es la segunda red social que la entidad pone en marcha. En 2009, La Caixa creó “Virt@ula”, para potenciar la interrelación entre sus más de 25.000 empleados con fines formativos y de negocio.
Otro buen ejemplo es el de la cadena hotelera Paradores, que ha lanzado “Paradores Activo”, una comunidad dirigida especialmente a aquellos clientes interesados en el turismo activo, facilitando una total interacción mediante herramientas que permiten compartir experiencias, opiniones, contactos, artículos, fotografías o vídeos. “Paradores Activo” alcanzó los 1.000 usuarios registrados durante sus 72 primeras horas de actividad, en las que consiguió más de 24.000 visitas.
Esto demuestra que la “socialización” de la oferta de las empresas es una tendencia cada vez más extendida, porque las firmas han comprendido que la relación directa con el cliente es un activo más para el negocio.
