El 96% de los directivos encuestados por la Fundación Adecco reconoce la importancia que la Responsabilidad Corporativa debe tener en la empresa del siglo XXI |
Por
segundo año consecutivo, la Fundación Adecco ha publicado el estudio “Directivos
y Responsabilidad Corporativa”, encuestando a 150 altos mandos de compañías de
todos los sectores. La conclusión generalizada que se extrae de este informe es
que la Responsabilidad Social Empresarial es la mejor respuesta en tiempos
difíciles, así como el único camino para que una empresa sea sostenible y
perdure en el tiempo.
Precisamente, según otro reciente estudio de la Fundación Adecco, un 70% de los ciudadanos exige a las
empresas el mismo grado de responsabilidad social que a los poderes públicos.
Esta cifra da cuenta del compromiso casi obligado que deben asumir las
compañías con respecto a la RSE. Sin embargo, buena parte de la sociedad
continúa mirando a las empresas con ojos muy escépticos, asociando todas las
acciones solidarias a marketing, publicidad o lavado de imagen. Ante esta
circunstancia, los directivos coinciden en la necesidad de promover nuevas vías
de comunicación de sus acciones responsables, punto en el cual las redes
sociales se alzan como plataforma preferida.
Aunque es innegable que
uno de los objetivos de la comunicación de las acciones responsables es la
notoriedad, este no es el único. Es importante que llegue a la opinión pública
que comunicando la RSE también se promueve un efecto contagio y se sensibiliza
tanto a la ciudadanía como al resto del tejido empresarial, dotándola de nuevos
valores y actitudes.
De hecho, el 96% de los
directivos encuestados reconoce la importancia que la Responsabilidad
Corporativa debe tener en la empresa del siglo XXI. Sin embargo, un 22,3%
admite que su organización no concede demasiada importancia a este elemento y
que necesita impulsarlo. En concreto, un 16,7% dice que se le concede poca
relevancia, y un 5,6% que no se le concede ninguna.
Por otra parte, el 90% de los
directivos encuestados por Adecco coincide en que los empleados son su
principal grupo de interés. Por ello, favorecer la satisfacción o felicidad
laboral constituye uno de los principales retos para toda empresa que se
precie.