lunes, 9 de julio de 2012

UNA GALICIA DE PRIMERA: el ascenso de Dépor y Celta como revulsivo de la economía y la imagen gallega



Los dos principales equipos de fútbol gallegos, el Deportivo de La Coruña y el Celta de Vigo, vuelven a estar en la Primera División de la Liga española que, para muchos expertos en este deporte, es la más competitiva y con más calidad técnica del mundo. Además, no sólo han logrado el ascenso, sino que han completado ambos un año brillante. Los blanquiazules pulverizaron dos récords: el de número puntos y el de victorias en Segunda, mientras que los celestes se han convertido en la plantilla que más goles ha marcado durante una temporada en dicha categoría, con 83 tantos. Pero la importancia de este éxito trasciende el plano de lo futbolístico y lo deportivo.  




La repercusión de contar con un equipo en Primera trae consigo una oportunidad inmejorable de recuperación económica y social. Para empezar, más allá de los presupuestos de los clubes, que serán más abultados este año, las dos principales ciudades gallegas comenzarán a recibir de forma regular a las aficiones de las clubes más destacados a nivel nacional e internacional, como el Real Madrid y el Barcelona, que son mucho más abundantes que las de los conjuntos de Segunda División y realizan un mayor seguimiento de los partidos. Esta inyección extra de turistas beneficiará directamente al sector servicios.
Según cálculos estimados que ya se han podido leer en distintos medios de comunicación, sólo en Vigo, teniendo en cuenta que la media de aficionados foráneos aumentará en 5.000 personas por partido (entre los seguidores del club contrario y los hinchas propios que acudirán a la ciudad desde otros lugares de Galicia), y que estos gastarán aproximadamente cien euros por estancia (entre restauración, hoteles y comercio); los ingresos añadidos ascenderán a un mínimo de 10 millones de euros. Nada más y nada menos, el ascenso a Primera significa que las localidades gallegas vuelven a situarse en el primer plano del mapa turístico español.

Además, el impacto positivo que genera un club de Primera División no depende sólo de cifras objetivas. Para el devenir de la economía gallega, es igual o incluso más relevante el aumento de la presencia mediática de A Coruña y Vigo y de su nivel de reconocimiento en el exterior. La proyección de las ciudades a través de sus equipos de fútbol mejora si estos se encuentran en la élite, funcionando como auténticos embajadores de la calidad de su oferta y reforzando su imagen de marca. El valor de este tipo de publicidad, a la que va aparejada la ilusión y el entusiasmo de los habitantes, es incalculable y, desde luego, mucho más efectivo que cualquier campaña pagada.

El ascenso a primera supone, por tanto, subir de categoría a nivel colectivo, como sociedad: incrementa el orgullo de formar parte de un territorio capaz de competir con los mejores, consolidando el arraigo emocional e identitario, y consigue que los propios gallegos actúen como los mejores prescriptores de la Comunidad a la que pertenecen.